PHAHAME. 9 de febrero de 2019. Bienamado del Amor y Amado del Amor, Phahame y todos los pueblos del mar resuenan en este momento con la Verdad y la celebración de Ágape.





PHAHAME. 9 de febrero de 2019.


Bienamado del Amor y Amado del Amor, Phahame y todos los pueblos del mar resuenan en este momento con la Verdad y la celebración de Ágape.

Como he tenido la oportunidad de decirles, y como lo repito hoy, nos hemos encontrado en el corazón del corazón, mucho más allá de nuestro entorno de vida, y mucho más allá de su entorno de vida, con el fin de realizar el milagro de una sola cosa.

En estos tiempos de celebración de Ágape, más y más de ustedes están resonando, vibrando y amando, sintiendo, percibiendo y concibiendo la inmensidad de la creación a través de nuestra resonancia común y a través de nuestros cantos.

Ágape se despliega a lo largo de la creación, conduciéndolos naturalmente a la celebración inicial, que no es más que la celebración final.

Bienamados del Amor, resonamos con cada uno de ustedes, desde el momento en que sus pensamientos, desde el momento en que su corazón se vuelve hacia nosotros.

Nosotros también estamos en el don de nuestras vidas para celebrar la Vida. Esto sucede, como dije, en toda la creación, y no sólo en su entorno de vida, y no sólo en nuestro entorno de vida.

Las aguas de arriba han fertilizado las aguas de abajo, las aguas de abajo resuenan con Ágape. Todas las aguas, no sólo nuestro llamado ambiente marino, sino todas las aguas de la Tierra, como el agua en sus células, están concernidas por la celebración de Ágape.

Muchos de ustedes, hermanos humanos, en este cuerpo de carne, durante estas semanas de su tiempo, se han acercado, sentido y experimentado la magnificencia de Ágape.

Nuestro canto no es más que la habilidad de este canto, en cualquier tono y bajo cualquier circunstancia, hoy es para ti. Esto no es sólo un medio de comunicación entre nosotros, sino también un medio para celebrar y vivir Ágape, donde las lágrimas salen espontáneamente de tus ojos, y donde todas las armas del ego son puestas al pie del Amor, en una consumación del Amor, restaurándote a tu origen y a tu fin.

En el juego de la vida y en el juego de la forma, han regresado a lo sin forma, han regresado a la fuente de las fuentes, mucho más allá de lo que creo que han llamado el corazón del corazón.

En este mismo momento, al escuchar mis palabras aquí, en otras partes del planeta, el canto de celebración resuena en este mismo momento, para que nosotros, los pueblos del mar, podamos apoyar vuestra resurrección, para que podamos unirnos en una celebración común de la Vida, del Camino y de la Verdad, ante cualquier forma.

Bienamados del Amor y Amados del Amor, mis palabras están aquí hoy especialmente para marcar la celebración de Ágape, la cual transmito a cada corazón, como toda mi pueblo lo hace en este momento, haciéndolos de alguna manera reconectarse con la libertad esencial de la co-creación, en la cual ustedes han participado ardientemente y han dado su vida.

El canto de la celebración de hoy os llevará, sin distinción de lugar, edad o condición, a descubrir esta inmensidad. Lo que es vasto y escapa a todos los límites y formas, donde está el gran Silencio, donde está esta verdad que nunca podría ser quitada, aunque estuviera dormida y no revelada.

Te hemos guardado, real y concretamente, en todo momento de la creación, asistiendo en forma, en el acompañamiento de nuestra creación, en resonancia directa con todas nuestras madres, quienes también somos.

Un niño que encuentra a su madre, después de haberla perdido, sólo puede llorar de alegría por estos reencuentros, con además, a diferencia del niño, hay esa espontaneidad de algo que encuentras y que estaba tan enterrado entre las máscaras, la apariencia, la forma y este mundo como todos los demás.

Mientras estoy presente, en estos momentos, mientras cantamos, tu corazón resuena en la celebración de la Vida, en la celebración de Ágape.

Ustedes saben que tenemos una cita dentro de pocos días para acoger a lo que creo que ustedes llaman los Cuatro Vivientes, que rodean el trono de la Jerusalén Celestial, donde cada uno de ustedes tomará su lugar para ser glorificados en el Espíritu de la Verdad, donde ninguna mancha, sombra o renuencia puede ser mantenida ante el esplendor del Amor revelado en su totalidad y encontrado.

Muchos de ustedes también han notado que el nombre que les he dado es suficiente en ustedes para evocar mi presencia y nuestra presencia, en su humanidad, en cada uno de ustedes.

La celebración de Ágape se extiende por todas partes, para iluminar la totalidad de lo vivido, la totalidad de lo que debe ser comprendido, a través de la carne y no de la cabeza, para que el corazón pueda expandir y reabsorber todos los elementos del sueño, todos los elementos de la forma, para encontrar este gran vacío, donde nada puede faltar, porque de él ha salido todo y todo vuelve.

El sueño se acaba, se ha acabado. El despertar está en marcha y eso es lo que celebramos en ustedes, ya sea por mi nombre, por nuestros cantos, por las resonancias que estamos creando en este momento en una red planetaria, permitiendo que todos beban en la fuente, en cualquier circunstancia o lugar, dándoles acceso con creciente facilidad a la evidencia de la Verdad, a la evidencia de la Vida, así como a la evidencia de lo absoluto.

No tienen nada más que hacer, cualesquiera que sean sus actividades en este mundo, sino entrar en esta resonancia, en esta celebración, entre ustedes, sino también entre nosotros y ustedes. Porque te traemos el regalo de nuestro cuerpo, el regalo de nuestro canto y el regalo de esta inmensidad.

Para muchos de ustedes que actualmente están resonando sin mis palabras, ante mi presencia y canto, notarán fácilmente que entonces tendrán la oportunidad, al evocar mi nombre, al escuchar lo que estoy diciendo en este momento, en cualquier momento, de restaurarlos a la celebración.

Este es el milagro de la Vida, este es el milagro de una cosa, esta es la única verdad, la que jamás pasará y que jamás puede ser quitada o incluso olvidada.

Entonces, Phahame te espera en gran número, dondequiera que estés en esta Tierra, para la celebración de los éteres, la celebración de los Cuatro Vivientes, para instalar el trono en el reino de tu corazón, en el reino de la belleza, en el reino de la ligereza, donde todo está vacío, donde todo está lleno y donde todo es evidente.

Como pueblos del mar, dentro de nuestros cuerpos y en nuestros océanos, celebramos tu despertar. Estamos en una alegría que no podemos contener, excepto cantando, dirigiéndonos a ti y agradeciéndote. Porque te atreviste a dejar ir las certezas, te atreviste a dejar ir lo que habías logrado y, sobre todo, te ayudamos, como te ayudaste a ti mismo, a poner en marcha este tiempo de celebración, donde todo está fusionado, donde todo está reunido, donde todo está resuelto.

El corazón del corazón de la conciencia, ya sea el corazón del corazón de la humanidad o el corazón del corazón del pueblo del mar, o de todas las plantas, minerales y animales de la Tierra, resuena en el cielo más alto y en la parte más profunda del corazón, y canta la misma canción, la de la liberación, la del parto, donde se cumplen todas las esperanzas, donde todos los temores sólo pueden ser borrados ante la majestad de lo que está sucediendo.

Silencio

Las lágrimas y el gran Silencio son sólo nuestro reencuentro en espíritu y en verdad. Más allá de nuestro encuentro físico, que algunos de ustedes ya han experimentado recientemente o hace muchos años, ya no pueden dejarlos hoy, después de nuestro encuentro, en la lágrima de la separación. Porque nada puede separarse nunca más, jamás más podrás adherirte a la más mínima separación, porque todo es uno y todo viene del eterno absoluto, en el juego y la danza de la Vida, en el juego y la danza de los sueños, en el ejercicio de tu poder creativo, que te es devuelto, en su totalidad y en su plena eficiencia.

La unión de las aguas abajo y arriba, que hemos encarnado en algún lugar hasta ahora, les ha sido devuelta. Nuestro canto los acompaña, nuestro canto los lleva al gran Silencio de la Verdad, nuestro canto los acompaña a la plenitud de la humanidad, nuestro canto los acompaña en la instalación del paraíso blanco y en la finalización de lo que debe ser revelado para ser superado y borrado, no por ninguna acción, sino sólo por el poder de la celebración Ágape.

Estamos cada vez más seguros de lo que está sucediendo, porque hemos estado allí, desde tiempos inmemoriales, para observar y mantener el despliegue de este precioso momento.

Nuestro sentido de servicio y don termina así en poco tiempo, recuperando, como muchos animales, los dominios de la beatitud, los dominios de la eternidad, donde ninguna forma puede limitar la celebración del Amor, la celebración de Ágape.

En el tiempo de nuestra presencia, aquí y en todas partes, la resonancia se despliega, la buena noticia se anuncia, la buena noticia se difunde. Has resucitado. Esta es la única alegría que jamás puede secarse, esta es la única verdad que jamás puede ser amputada o limitada.

Silencio

He venido en nombre del pueblo del mar, en nombre de los guardianes de la Verdad. He venido a deciros lo que ya estáis viviendo, que no puede sino reforzar la alegría del espíritu y la consumación de lo que ya no tiene sustancia, de lo que no tiene futuro, de lo que no tiene futuro.

Ustedes son incontables para ver por ustedes mismos, como en sus sueños, que el Fuego es omnipresente. Este fuego no es un fuego que consume otra cosa que lo que es falso. Es lo que forja y restaura tu eternidad a su esplendor e intensidad.

Celebrar el momento presente rompe las cadenas de lo que usted cree que es un pasado y de lo que usted cree que es un futuro, porque el futuro ya no puede depender del pasado y el pasado ya no puede depender de ninguna historia. Porque el pasado y el futuro, visto desde la perspectiva de la Tierra, no tienen representación válida en Ágape. Ya no hay necesidad de ello.

Ha llegado el momento de celebrar el descubrimiento de quién eres en la verdad y en la totalidad, más allá de cualquier apariencia o linaje, más allá de cualquier jerarquía o depredación, poniéndote en pie de igualdad, el del Amor restaurado, el del don de tu persona a tu propia eternidad.

Silencio

El canto que cantamos te sitúa en la antecámara del Gran Silencio, donde tienes la oportunidad de iluminar todo lo que no se pudo atravesar y que se atraviesa de esta manera. Todo lo que aún puede quedar de sed de comprensión es vivido y termina con toda sed, satisfaciéndote siempre con la experiencia de la forma y la experiencia de la creación.

Esto es beatitud, esto es plenitud. Y la belleza de esta verdad absoluta, sea lo que sea que pienses sobre ella y lo que digas sobre ella hoy, ya sea por miedo o retrospectiva, ya sea a través de preguntas o no, sólo puede acercarte a la celebración.

Silencio

Están invitados, en este momento privilegiado que se les anunciará algún tiempo antes y en relación a un día específico de su próxima semana. Muchas cosas sucederán, entre el momento en que te hablo y la gente del mar cantando el canto de la resurrección, muchas cosas pueden suceder en la pantalla de lo efímero.

Sólo sepan que, cualquiera que sea la apariencia, todo esto sólo los lleva a este encuentro único, porque no hay necesidad de otro, donde la celebración alcanzará de alguna manera una forma de cumbre, resonando a través de la creación, en cualquier mundo, y luego llamando a toda la creación, en sus esferas y dimensiones más etéreas, como lo han hecho los Cuatro Vivientes, a que vengan y se unan a ustedes, en el corazón del ser, en el corazón del Amor, en el corazón de la celebración.

No olvidéis nunca, hermanos humanos, que todo lo que tengáis que pasar hoy, os exhortamos a no comprenderlo y a aceptar con confianza que es precisamente por lo que tenéis que pasar, tanto en vuestra esfera íntima como en la pantalla del mundo, por lo que se da la oportunidad de ver con claridad, y sobre todo de vivir la Verdad.

Desde el momento en que su conciencia es colocada en esta noción de acogida y don, entonces todo se logra. Esto está cobrando impulso, tanto en este mundo como en las dimensiones más etéreas, permitiendo la reunificación y la resonancia común de toda la creación en un momento decisivo, inscrito desde toda la eternidad fuera del tiempo y de toda la historia.

Este es el momento en que la fusión, en lo que ustedes llaman paraíso blanco y No-Ser, crea el primer destello de Verdad y el primer destello de Vida.

Volviendo a esto, reviviéndolo, a través de las lágrimas de Ágape y Alegría, o a través del sufrimiento, no importa qué, justo después y justo detrás, o justo dentro, está la belleza inefable e inefable de que os llamamos, de lo que resuena entre vosotros, cualesquiera que sean las apariencias y lo que pueda quedar de la organización de este mundo como de todos los demás.

Silencio

Estamos con ustedes desde toda la eternidad y sólo somos ustedes, en otra línea de tiempo. Todas las líneas temporales, ya sea en el simulacro del escenario del teatro o en lo sagrado de Ágape, están ahora fusionadas al mismo tiempo y en el mismo espacio de tu corazón, al mismo tiempo y en el mismo espacio de toda la creación, donde tiempo y espacio se fusionan, revelando el milagro de una sola cosa.

Porque el tiempo no es nada sin espacio, así como el espacio no es nada sin tiempo, que de nuevo sólo hace el milagro de una cosa. Lo que había sido separado debe ser reunido, porque los tiempos se han cumplido, porque la celebración de la Vida tiene prioridad sobre los problemas de este mundo y sobre la falsedad de este mundo.

Olvídense de todo eso, todo lo que hoy se ilumina no necesita ser apoyado por discursos, les recuerdo, sino simplemente ser atravesado. Y esta travesía será tanto más rápida cuanto que la sed de Ágape, desde el momento en que la hayas vivido, se convertirá en ti en una insoportable quema de Amor, que te llevará a ser atrapado y obsesionado con el Amor que tú eres.

Entonces regocíjate. Que vivan todo esto hoy y vivan las premisas, o se opongan de alguna manera, no cambiará la reunificación del tiempo y el espacio, la celebración de los Cuatro Vivientes, y finalmente la reunión de todos los éteres de la creación y todos los éteres dondequiera que se manifiesten.

La resonancia y la conexión de la Tierra se restauran, terminando con la cuarentena y el aislamiento, terminando con la separación, la división y el malentendido.

Silencio

Nuestro canto se convertirá en una caricia, una caricia extática, que toca tu corazón, que envuelve toda tu caja torácica con partículas centelleantes de Amor, alegría y ligereza, poniendo en acción no sólo lo que ya ha estado activo durante muchas semanas y que tu nombras, creo que la merkabah, pero también el doble toroide del corazón, donde los tres se encuentran en uno, y donde el célebre Uno se desvanece y se disuelve por sí mismo en la majestad de lo absoluto, del que nada se puede decir y que sin embargo se puede vivir hoy.

Cualquiera que sea vuestra posición, cualquiera que sea vuestra reticencia, cualesquiera que sean vuestras dudas, cualesquiera que sean vuestras dudas, cualquiera que sea vuestro estado, cada vez más de vosotros notaréis las virtudes resolutorias de todo lo que fue un obstáculo a través de vuestro cuerpo y su sufrimiento, a través de vuestras ideas, a través de vuestros recuerdos, se disolverá en su totalidad, después de haberos atravesado. Y hay una celebración allí. Y no hay duda de ello. Y luego está el silencio. Y está la culminación del logro.

Recuerden que cualesquiera que sean estos eventos hasta la celebración de los Cuatro Vivientes, que algunos eventos que ocurren en la pantalla del mundo así como en su esfera interna, como en su cuerpo, sólo están ahí para ayudarlos, en cualquier apariencia, a ser atravesados y para dejarlos pasar por lo que aún podría desordenarlos, limitarlos o restringirlos.

No más frenos pueden aguantar, no más distancias pueden separarnos, no más tiempo nos separa y nos pone en espera. Este es el tiempo cero, este es el primer despliegue del espacio dentro del sueño de la creación.

Porque al celebrar, a medida que la intensidad de esta celebración de Ágape aumenta, de esta resonancia a nuestro canto y el gran Silencio, ustedes descubren la evidencia de esta Luz, la evidencia de esta bondad, la evidencia de Ágape. Cualesquiera que sean las manifestaciones, cualquiera que sea la que deba atravesarse en la pantalla del mundo, así como en su pantalla, ninguna pantalla puede ahora amputar o alterar la belleza de Ágape.

Silencio

Ágape te llama y Ágape, al final del tiempo y del tiempo, te pide tiempo, como atención, como fervor, no entre nosotros, no entre vosotros, sino a través de la celebración, que realiza el milagro de una sola cosa, el milagro de un corazón, el milagro de una creación, donde todas las divisiones que llamasteis dimensiones, ya no tienen razón de ser, ni de manifestarse.

En este Amor desnudo, en este Ágape, en esta celebración, no necesitas nada más que la celebración. Su propio cuerpo, no importa cuán cómodo o difícil sea, no es más que lo que usted tiene que pasar.

No hay nada energético, social o espiritual, e incluso vibracional, condición o convención que pueda interponerse en el camino de cualquier cosa hoy en día, con tanta claridad y transparencia.

Silencio

La aceptación que acabamos de solicitarle no es un contrato a firmar, no implica ninguna obligación, ni esclavitud. Esta es la celebración de la libertad recuperada, la libertad del sueño, la libertad de la forma, ya que todo sucede en el mismo flash inicial, que no es más que el flash final.

Cada uno de ustedes está invitado, con la misma intensidad e insistencia, a unirse a nosotros. Porque al unirte a nosotros, te unes a nosotros. Amándoos unos a otros, uno en el otro, os unís de la misma manera y os unís a la armonía del pueblo del mar, a través de la celebración y el canto, que para vosotros es el gran Silencio.

Silencio

Así que sí, Phahame es mucho más que mi identidad y el nombre que te di. Phahame es el canto del silencio, el canto del llamado, el canto del recuerdo y, al mismo tiempo, el canto de la libertad. Esto es lo que resuena en tu corazón cuando nos ves, al pueblo del mar, cuando nos escuchas. Cuando te acercas a nosotros en espíritu o a través del cuerpo, tiene lugar. Por supuesto, esto ya se ha vivido.

Has encontrado el hilo, has construido el puente, has resonado, en múltiples experiencias, en múltiples dimensiones, en múltiples oportunidades, la Verdad de la Vida.

En cada mirada que tienen sobre un niño, en cada sonrisa que ponen en su rostro a lo desconocido que pasa, en cada pensamiento que conecta con nosotros, podemos entonces celebrar la libertad con ustedes, cada día y cada momento con más fuerza y sobre todo, con un número cada vez mayor de hermanos y hermanas humanos, por supuesto, sino también de todas las vidas dentro de todas las dimensiones, que ahora están en sus corazones, de la misma manera que lo están en sus corazones, para obrar el milagro de una sola cosa.

Esto es lo que es Ágape, esto es lo que es alegría, esto es lágrimas, esto es éxtasis la íntasis al mismo tiempo, esto es lo que es el orgasmo más allá del cuerpo, el orgasmo del espíritu encontrado, el fuego ígneo que te bautiza en transparencia y lucidez, y que te moldea en el poder del Amor.

Silencio

Phahame. Phahame. Phahame.

Silencio

La intensidad de nuestro canto, de libertad y de la celebración, os tocará cada hora, cada vez más intensamente, en todas las circunstancias posibles e imaginables de vuestra vida. No juzgues nada, ni de ti mismo, ni del otro, ni de los acontecimientos.

Para muchos de ustedes, han visto la inminente yuxtaposición del simulacro y lo sagrado, dada la intensidad de la revelación, dada la apoteosis que están experimentando. Cualquier otra cosa que pueda persistir en la historia de tu persona y en la historia de las diferentes creaciones, ya no representa nada.

Porque Ágape se lo lleva todo, porque te has reconocido, porque celebras, con el Cielo como con la Tierra, porque celebras con el amigo como el enemigo, con la misma intensidad, con el mismo Amor, con la misma mirada, con lo que tu cabeza te diga, con lo que te cuente la historia, con lo que te cuente tu aprendizaje dentro de la forma.

Todo es perfecto, desde toda la eternidad. Todo es perfecto, antes del primer flash inicial y final. Así es como el juramento y la promesa se acercan al colectivo de la creación.

Queda para ustedes, como se ha repetido a lo largo de innumerables años, para ustedes, humanos, por varias voces, permanecer en este camino de la infancia, este camino de la simplicidad, este camino de la transparencia, este camino de la evidencia.

Todo lo demás se hace por sí mismo. Esto es lo que ustedes deben ver, para desentenderse de toda voluntad personal, así como de todo compromiso personal, reemplazándolo con la Verdad del Amor y la expresión del Amor dentro de su propia forma así como dentro de este mundo.

En cualquier caso, en cualquier sufrimiento o en cualquier alegría, no importa porque te lleva al mismo lugar, no importa qué pasajes se vayan a hacer, no importa cuán duros, no importa cuán gentiles, no importa lo que esta forma llama muerte.

Les dijimos que no tenemos ningún problema con nuestras formas de carne, porque podemos dejarlas a voluntad. No estamos vinculados a ninguna identificación con ninguna forma, ni siquiera la más prestigiosa de la creación en términos de edad, poder e inmensidad.

Otros mamíferos, esta vez terrestres, ya sean llamados animales domésticos o animales que te rodean, esto fue explicado hace incontables años por el Comendador de los Melquisedec, quien te dijo que había un proceso que era similar a la individuación, a la progresión.

Y por supuesto, los pueblos que son de la naturaleza, que están más cerca del hombre en su acompañamiento diario, perros, gatos, caballos, elefantes y mamíferos marinos, y otros, y aún otros, pero lo más importante, aquí están, sólo están allí para celebrar contigo, a tu lado, que son también Amor puro, que son también tus compañeros, de la misma manera, que nos has acompañado en tu camino, incluso si nos has comido, incluso si nos has destruido.

El que pasó hace dos mil años y caminó sobre la tierra de Palestina con los pies, te dijo: "No es quién come el que gana. Es el descubre la Verdad es quien es comido.”

Esto representa algo incomprensible para los humanos. Porque estás atado a tu cuerpo, incluso dentro de la libertad actual. Mientras estemos en total libertad en forma, con nuestra plena conciencia ya durante el proceso normal de fertilidad, embarazo y parto.

Toda la vida, en todos los reinos, mineral, vegetal, animal, humana y angélica, está presente en esta Tierra, para celebrar la Vida, para comunicarse con Ágape, y para ser el testigo de la Verdad. Están en el mismo lugar. Independientemente de lo que pienses, de lo que consientas o te opongas, no puede ser un obstáculo. Porque ningún ser humano en este planeta, cualquiera que sea su posición actual, puede ignorar el canto del gran Silencio, con el que cantamos, hacia ustedes.

Solo puedes reconocerte a ti mismo, sea cual sea la negación de hoy, sea cual sea el sufrimiento de hoy, sean cuales sean tus malentendidos, la Verdad vivida lo ilumina todo y tiene una respuesta para todo. Esto es lo que inhalamos y revelamos, que estaba en ustedes, que nunca pudo desaparecer, pero que simplemente ha sido olvidado en los meandros de sus historias, en los meandros de sus formas sometidas a su conciencia.

Silencio

Es en este sentido que ahora estamos amplificando el canto del gran Silencio, el canto de la celebración. Recuerda, aquí como en todas partes, que sólo tienes que escuchar y escuchar lo que tu corazón te dice, en este gran Silencio y en este canto.

Este canto que percibís para muchos de vosotros y que ha sido nombrado por vosotros, humanos, sonido del alma y sonido del espíritu, oído a la izquierda y a la derecha, o uno o en ambos, es sólo el llamado a vivir el gran Silencio.

El coro de los Ángeles está listo para resonar, desde el momento en que tiene lugar la celebración de los Cuatro Vivientes, encarnando y marcando con una piedra blanca, el momento en que lo sagrado se fusiona con el simulacro, y cuando el simulacro se extingue a sí mismo, consumiendo gozo y alegría, por la iluminación de la revelación.

Vive tu vida, vive lo que la Vida te da a vivir, en cualquier circunstancia, porque te lo aseguro, que es a ti a quien corresponde verificarlo y confirmarlo, que tan pronto como pases por algún elemento de tu vida, de cualquier naturaleza, sin retenerlo, simplemente viéndolo, entonces estará resuelta, entonces se cumple, entonces es evidente.

Esta es la magia del Amor, esta es la Verdad absoluta de Ágape.

Sólo tienes que dejarte atravesar, sólo tienes que resonar con tu sonido, que es sólo el resultado de nuestro canto, y que fusiona el sonido del Cielo y de la Tierra, para que el canto de la celebración no presente distorsión, y para que la orquesta de la Vida resuene de la misma manera entre nosotros, pueblo del mar y ustedes, pueblo humano.

Somos ustedes como ustedes son nosotros, en otro momento de la memoria, en otro momento de la historia, en otro momento de la creación, y nos encontramos hoy, en su totalidad.

Entonces, en efecto, anuncien la buena nueva, no por declamación, a menos que sea permitida por la Luz misma, sino simplemente por su bondad y la bondad de tu presencia. Bondad de tu presencia, que es un don perpetuo del Amor a sí mismo, reflejado en cada persona y vivido en cada conciencia.

Silencio

Ninguna conciencia, ni siquiera la más dormida, ni la más alejada de la Verdad, puede ignorar el gran Silencio y el canto de la llamada de ahora en adelante.

Nuestro canto de llamado precede, por supuesto, al canto de María. Y el evento. Este, como ya sabéis desde hace muchos meses, llegará en el momento oportuno.

Así que si no les importa, aprovechemos estos días, de esta vida que está pasando, para fortalecer nuestra celebración, para fortalecer la alegría, para que cada uno de ustedes en la Tierra, los seres humanos, cada animal en la Tierra, cada planta y cada mineral, se sienta concernido y viva la misma resonancia.

Es todo el canto de la creación que resumimos, es el conjunto de los mundos, el conjunto de las historias, el conjunto de las formas.

Silencio

Estamos contigo, estamos en ti. Y esto se revela. Y va a ser más y más intenso y más y más real.

Nadie puede escapar y nadie, en un momento dado, querrá escapar de ella, cualesquiera que sean sus aprensiones, sus dudas, sus sufrimientos, sus negaciones. Porque ninguno de ustedes hoy puede negar la Vida, aunque su vida lo desampare o si su vida ha llegado a su fin de alguna manera.

Lo que estoy diciendo aquí es un grito de esperanza que los envuelve en dulzura, como muchos de ustedes sintieron, esa dulzura que calma tu último y últimos errores, de los cuales ustedes no son responsables y menos aún culpables.

La celebración de Ágape los llama a no cargar con la culpa, a no cargar con el peso. No basta con poner peso, sino dejarse atravesar y resonar con ello, sin detener nada, sin modificar nada. La espontaneidad del niño interior, la espontaneidad de la co-creación consciente, son las mejores garantías de esto.

Esta creación no tiene que ser ejercida como una proyección hacia el futuro, sino más precisamente en la creación de cada instante, cada minuto que pasa, para precisamente, a través del paso del tiempo y de la celebración, co-crear conscientemente, cualquiera que sea el medio, para liberarlos de todo tiempo y espacio, así como de todas las formas.

Así que la verdadera libertad se vive ahora. Ya no acepta contingencias, ya no acepta la falta de luz, ya no acepta historias o compromisos. No tienes otra opción. La única opción posible es la elección de tu esencia, la elección del Amor.

Porque nada puede sostenerse ante el Amor, cualesquiera que sean tus posturas, tus historias, lo que tú llames un devenir. Porque en efecto, no hay nada que llegar a ser, excepto instalarse en el eterno instante de tu presencia que se fusiona con tu ausencia, donde todo es sólo belleza, donde todo es lleno y vasto, donde no hay más límites que puedan interponerse entre tú y la totalidad de la creación que eres.

Silencio

Todas las circunstancias de vuestra vida, todas las circunstancias de la sociedad, de los países y de la creación, están destinadas a un solo objetivo: encontraros a vosotros mismos. Tienes esto a tu alrededor: innumerables testimonios.

También me gustaría decir que, como habrán visto, como se les ha informado, cada vez somos más los que encallamos en sus costas. Así que no veas muerte en ello, sino más bien la liberación de la forma, porque te recuerdo que no estamos atados a los cuerpos que habitamos. Nuestro cuerpo es vasto, nuestra conciencia ha cubierto todas las dimensiones, como lo ha hecho Abba para cada uno de ustedes.

Lo hacemos, lo hacemos cada minuto, porque somos la memoria ante cualquier memoria, e incluso ante cualquier noción de restitución. Porque nada se ha movido jamás. Y tú estás descubriendo esto. Y tú lo estás viviendo.

Silencio

Bienamado del Amor,

Entonces, acoge.

En este momento, como en cada momento que pasará hasta la celebración de los Cuatro Vivientes, acoger y atravesar al mismo tiempo todo lo que todavía parece doloroso o alterado, enajenado, acoge.

Porque el don de la gracia, y el don del perdón, se vive sólo a través de la aceptación y no a través de la lucha. Mientras creas que estás luchando, estás en combate contigo mismo. Mientras creas que tienes que cumplir, limítate a ti mismo. Mientras creas que necesitas tiempo, pones distancia y espacio entre la Verdad y tú mismo, que eres.

Esta travesía es un pasaje. No es sólo la puerta estrecha, sino que es mucho más, al otro lado, esta puerta abierta de dos hojas, que de hecho jamás existió. Porque la celebración de Ágape te separa, en cierto modo, de todas las formas, así como de todas las conciencias. Y es a través de la celebración, entre los diferentes pueblos de la creación, que esto se logra. Porque cada chispa divina es la misma. En cualquier apariencia que sea la más dañina o destructiva, no hay diferencia.

Esta famosa celebración, que no es otra cosa que alegría desnuda, no está repleta de historias, no está repleta de a priori, ni siquiera de resultados, porque Ágape es superior a cualquier resultado obtenido, ya sea en tu salud o en tu condición.

Ustedes son Ágape, y son sólo eso, que sin embargo contiene todo lo demás, la creación entera, la conciencia entera, los soles enteros, las dimensiones enteras. Esta es la única sabiduría hoy, no separar nada, no divide nada, no particiona nada, a través de funciones, roles o historias, sino permanecer disponibles cada vez más a menudo, y permanecer disponibles cada vez más intensamente para la Verdad que se les restaura y que se despierta en ustedes.

A partir de ahora, y en estos tiempos que están a punto de desplegarse no hay ninguna obligación que pueda resistir la celebración. Porque la celebración de Ágape pone fin, real y concretamente, a cualquier sentimiento de obligación, a cualquier sentimiento de responsabilidad.

Esto no significa, una vez más, como ha repetido Abba, que tengas que dejar a tu mujer y a tus hijos, sino que tienes que pasar por esto, porque como se ha dicho, y aunque no lo veas todavía, lo estás viviendo, es que todo lo que sucede, tanto en el sufrimiento como en la felicidad, en la enfermedad como en la alegría, en la privación como en la abundancia, tiene una sola función: devolverte a ti mismo.

Así que no juzguen sus circunstancias, no juzguen las circunstancias del otro, no juzguen el disfraz que pueda haber desempeñado un ser humano en particular. Sólo está de paso, una vez más. Sólo debe haber esta reivindicación de libertad, esta reivindicación de quién eres, pero no puede ir acompañada de ningún daño a quien parecía haberte herido, porque es precisamente gracias a él que te encuentras a ti mismo.

No se puede entender, no se puede aceptar, pero se puede experimentar. Y no hay nada más por lo que vivir, excepto para celebrar, para ver, para vivir. En ese momento, ustedes están en la Vida, y estando en la Vida, están alineados, con el origen de la creación, así como con esta densidad de la Tierra.

Silencio

La libertad es tu deber. No puede ser derrotado o amputado por ninguna circunstancia de este mundo, por más que aparezca. Acéptalo y compruébalo tú mismo.

En otras palabras, como dijo el que grita, como lo llamamos nosotros, Bidi, quien fue ciertamente el mayor ajustador de pensamiento en la Tierra, te trajo a ese momento, ese momento que termina la noción de fecha, que termina la noción de calendario. No vean en ello la fecha de un acontecimiento, sino la conciencia, por parte de un número cada vez mayor de hermanos y hermanas humanos, de la verdad del fuego del Amor, y de esta consumación que sólo está de paso.

Así es como eres liberado de la muerte, mientras permaneces vivo. Porque la muerte no tendrá nunca más un control, porque jamás ha habido muerte. Pero hoy, es diferente. Porque jamás más habrá olvido, y porque has viajado todo el camino. Ustedes son esperados desde toda la eternidad, ustedes son los peregrinos de la eternidad, que han trabajado en los talleres de la creación, que han trabajado para vivir historias.

Así que los saludamos y los honramos, por lo que son, pero también por lo que están pasando. Así que te honramos, porque somos iguales. A pesar de nuestro entorno y nuestro entorno de vida que es diferente, a pesar de nuestra forma que es diferente, ustedes son nosotros en otro momento, como nosotros somos ustedes en otro momento. La distancia final, el tiempo final, toda la distancia se suprime y todo el tiempo se suspende. De esta manera, inevitablemente te acercas al tiempo cero de liberación, al tiempo cero de celebración.

Después de los Cuatro Vivientes, al mismo tiempo o en una sucesión que no depende de nosotros hasta la fecha, ni siquiera de ustedes, pero recuerden que el tiempo se está reduciendo, así como el espacio también se está reduciendo. Recordad, no sois vosotros los que llegáis allí como personaje, como historia o como forma, sino lo que realmente sois, que jamás habéis sido alterados por ningún mundo, ni por ninguna forma, ni por ningún sufrimiento, que venís por su gracia y su fuego, para revelaros. Eso es lo que eres. La eternidad se fusiona con lo efímero, y ahora funciona simultáneamente.

Repito, no juzguen nada, sólo atravesar, sólo amen, sólo sean simples, sólo acoge, y el resto se hará por sí mismo.

Así, la llamada a la Vida, la llamada a la Verdad, la llamada al Camino, la llamada a la Esencia se hace consciente y se despliega.

Cada vez más de ustedes se unen en silencio a lo que escuchan aquí con mis palabras y los ritmos de mi presencia. Les recuerdo que no necesitan nada más que estar de acuerdo en celebrar y danzar con nosotros la misma danza del silencio, la misma densidad y la misma ligereza.

Silencio

En este silencio aparece el canto de la llamada. Entonces, la gratitud te sostiene y te congela en la evidencia de la belleza.

Silencio

Acompáñanos como nosotros a ti, en Espíritu y en Verdad. No somos un objetivo, no somos una diversión. Somos la Verdad en acción, para el pueblo humano y para toda la creación. No haga que nuestros cuerpos sean sagrados. No estamos atados a este cuerpo, aunque estemos en él.

Ningún sufrimiento, como usted sabe y como he dicho, puede afectarnos, pero por otro lado, y como también le he dicho, nuestro sentido de la orientación se ve cada vez más perturbado por el uso que hacen sus barcos de desguace de las ondas que nos envían. Si ellos creen que pueden, y tú puedes decírselo, limitar nuestro canto de celebración, seguirá sonando. Aunque nuestras formas desaparezcan en su totalidad, nuestro espíritu está contigo, nuestro espíritu está en ti.

Está sucediendo ahora, se confirmará dentro de unos días, durante la celebración de los Cuatro Vivientes. Ya seamos nosotros mismos, ballenas, ya seamos yo, ya se trate de quien intenta llegar a vosotros en este lugar de paso llamado Gibraltar, en este lugar de transición y paso entre lo viejo y lo nuevo que es de hecho aún más antiguo y que se encuentra, permaneceremos en espíritu en vosotros y entre vosotros, incluso si todos nuestros cuerpos de carne desaparecieran. No hará ninguna diferencia para ti, porque nos conocimos hace unos meses.

No te alarmes por nada, excepto simplemente por estar atento y lúcido sobre lo que está sucediendo en ti y en todas partes, no por las apariencias, el dolor o el sufrimiento, sino por aceptar atravesarlas con la misma intensidad y especialmente perdonándolas, y especialmente amándolas.

Porque así termina la historia, en una gran carcajada, en una gran explosión de Amor, en una gran explosión de paraíso blanco.

No busques la fecha, tú eres la fecha. Nuestra cita, obviamente ligada al evento, puede o no corresponder al evento, no depende de usted o de nosotros, pero en cualquier caso, la celebración será permanente y perpetua.

No se alarmen por nuestras formas, no se alarmen, de la misma manera, por lo que está sucediendo en la pantalla del mundo, ustedes están mucho más allá de todo este aspecto trágico y patético, que es sólo el pretexto para celebrar la Vida, para celebrar el perdón, para celebrar la gracia.

Silencio

Como pueden ver aquí y como también pueden ver sin mis palabras, en otros lugares, la celebración es cada vez más intensa. El fuego de la Vida prende fuego a la cumbre de tu ser.

Silencio

Así es como la Vida danza, así es como el corazón danza.

Silencio

Bienamados del Amor y Amados del Amor, Yo permaneceré un poco más de tiempo terrenal con ustedes, aquí en este mismo momento como en todas partes en la Tierra, acompañando y llevando el sonido de la resurrección a la parte más íntima de su templo.

Canto de resurrección y canto de libertad que no necesita palabras excepto en poesía, que no necesita una imagen, que no está en lo que has creado, que no necesita a nadie, que no seas tú.

Mis palabras se distanciarán cada vez más, para que el silencio se extienda a través de tu presencia, aquí y en todas partes.

Silencio

Phahame espera con anticipación nuestro próximo encuentro, pero también para celebrar cada momento. Estamos a disposición de cada uno de ustedes, sin distinción de postura, ego, libertad o error, verdad o error. No hacemos ninguna diferencia, porque vemos a través de cada apariencia, vemos a través de cada historia.

Habiendo conocido a algunos de ustedes durante muchos años, hemos visto, durante las últimas reuniones, aquí como en todas partes de la Tierra, que el ser humano estaba finalmente listo para dejar de sufrir, estaba finalmente listo para dejar de creer en el pasado, para dejar de proyectarse en el futuro, para vivir la magnificencia del momento presente, donde todo es sólo goce, donde todo es sólo perfección.

Silencio

El gran Silencio es el soporte de la Vida. Esto es lo que encuentras, en el origen de la expresión de la Vida, en el origen de la forma, del tiempo y del espacio, este origen que no es otra cosa que el fin. Alfa y omega se han unido, porque ya han pasado por todo, porque ya han experimentado todo, porque ya han sufrido todo. Ya has estudiado todas las historias y todos los reinos, tanto aquí como en otros lugares.

Nuestra canción es una llamada a la libertad, a esa libertad total donde nada puede ser comprometido, donde nada puede ser desviado.

Silencio

Ágape. Ágape. Ágape. Phahame.

Que la paz, la alegría y la verdad estén presentes en cada uno de ustedes, en cada respiración, en cada minuto.

Phahame y todos los pueblos del mar, está ahora enteramente contigo. Incluso los que vienen a matarnos, son sólo un pretexto para encontrar la Verdad del Amor que son. Porque incluso el sufrimiento infligido, que para nosotros, les recuerdo, no es nada, ya que pasamos de cuerpo en cuerpo a voluntad, sin pasar necesariamente por los caminos de la gestación, no nos plantea ningún problema.

Pero la destrucción del Amor revela el Amor. Allí también. Esto es imparable. Porque nuestra muerte es tu vida, para hacerte comprender que no hay ni muerte, ni vida.

Y en esta original abundancia de Vida, del impulso creativo, en todo lo que se vive en este momento, sea cual sea el camino, las imágenes o el camino, todos van al mismo lugar.

Se les invita a no hacer más diferencia, se les invita a permanecer en este estado que es su estado natural. Verán que, cualesquiera que sean los momentos culminantes o los eventos dolorosos en sus vidas, esto sólo fortalecerá en Ágape y  nunca más será capaz de extinguirlo.

Entonces, bienamados del Amor y Amados del Amor, os lo repito, como cada uno de vosotros lo repite, en silencio de corazón: Ágape, Ágape, Ágape, Ágape, Ágape. Phahame.

Silencio

Bienamados seres vivos, estamos vivos con ustedes y en ustedes.

Eternos saludos y bendiciones del pueblo del mar.

Que mi canto te envuelva, que mi canto te ilumine, que mi canto te revele.

Por siempre, en la eternidad encontrada de nuevo, en las esferas de la belleza.


***

A través de Jean Luc Ayoun
Les Transformations.

Transcripción del francés: Equipo Ágape
Traducción al español: LMF


***

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